- La portavoz de Unidas por Extremadura considera que unas de las lecciones del apagón es que el sistema eléctrico no puede depender de “empresas que han sido demasiado avariciosas y que han querido hacer dinero a costa de la seguridad de la ciudadanía”
- De Miguel plantea además que se industrialicen los territorios donde se produce la energía y que pasen a ser gestionados de forma pública los saltos hidroeléctricos cuyas licencias de explotación han caducado, como el del la Peña del Águila
Unidas por Extremadura ha registrado este viernes una iniciativa para que la producción y la distribución de energía se haga a través de una empresa pública de energía. La formación liderada por Irene de Miguel considera que el apagón ha evidenciado que “el modelo eléctrico está en manos de cuatro grandes empresas, que han sido demasiado avariciosas y que han querido hacer dinero a costa de la seguridad de los ciudadanos y ciudadanas”.
Así, Unidas por Extremadura reclama en esa propuesta que el Estado elabore un estudio para implementar esa empresa pública de energía, “como tienen otros países de nuestro entorno”. “Somos una excepción en Europa al no tener esa herramienta”, ha dicho De Miguel al registrar la propuesta en la Asamblea regional.
La portavoz ha añadido que la iniciativa también contempla la elaboración de un plan para industrializar los territorios donde se produce la energía. “Esta cuestión es muy importante para Extremadura porque no se entiende que seamos ricos en energía, pero luego toda la industria esté en otros lugares y haya que hacer un trabajo de distribución con su consecuente impacto y su consecuente pérdida de eficiencia energética”. “Extremadura se lo merece, y creo que es una deuda que tiene este país con nuestra tierra”, ha dicho.
Además, la formación también plantea que las centrales hidroeléctricas cuyas licencias estén caducadas pasen a ser gestionadas de forma pública. La portavoz ha recordado que estos saltos, como el de la Peña del Águila en la región, han sido explotados por empresas privadas gracias a una licitación durante 75 años, y que algunos, como el extremeño, ya tienen caducada esa licitación, “por lo que creemos que podrían pasar a manos públicas”, ha dicho De Miguel, quien cree que la energía hidráulica es fundamental en nuestro sistema energético, “ya que hemos visto en el apagón como fue la que nos salvó”. “Eso no puede estar en manos de grandes empresas que tienen otros intereses distintos al del bien común”, ha aseverado.