Desde Unidas por Extremadura y en coherencia con la gravedad de las últimas humillaciones y abusos sufridos en nuestra región, hacemos un llamamiento a la población extremeña a la migración desde las grandes compañías eléctricas y sus filiales de PVPC hacia otras pequeñas compañías, verdes y socialmente responsables.
En Extremadura llevamos tiempo sufriendo con especial dureza los abusos del oligopolio eléctrico. La subida de la tarifa es especialmente dolorosa si tenemos en cuenta que somos la región con la renta per cápita más baja de todo el país por lo que el esfuerzo en términos relativos se multiplica. A esto se le suman los últimos chantajes de estas compañías hacia el Gobierno de coalición para impedir una regulación o una simple intervención en los precios.
Aparte de esta problemática que sería común en todo el país, hay que sumarle las prácticas que estas compañías están llevando a cabo específicamente sobre nuestra región.
El vaciado de nuestros pantanos por pura especulación (ya que pueden vender la energía hidráulica, que es la más barata del mercado al precio más caro), ha dejado a muchos municipios colindantes sin agua potable, a empresas turísticas sin poder trabajar y al colectivo de la agricultura y la ganadería sin poder regar ni dar de beber a sus animales. A todos y a todas se nos ha encogido el corazón al ver las imágenes del Tajo a su paso por Monfragüe con el aspecto más insalubre que se recuerda.
Además de esto hay que denunciar la manera caótica y desordenada en que se está llevando a cabo el desarrollo de las energías renovables en nuestra región, especialmente la fotovoltaica y la eólica. Está claro que el desarrollo de las renovables iba a suponer un cambio en el paisaje, pero la falta de un Plan de ordenación se está traduciendo en que, en vez de implantar estas estructuras en terrenos baldíos reservados a estas nuevas fuentes de energía, se están eliminando hectáreas de terrenos de regadío y de dehesas, que deberían seguir cumpliendo una función que es fundamental para nuestro ecosistema y nuestra economía.
La connivencia del tándem PSOE-PP con las compañías eléctricas en nuestra región, impidiendo incluso que se investiguen prácticas que podrían ser constitutivas de delitos medioambientales, hace que desde nuestra posición no nos queden recursos políticos y pidamos abiertamente abandonar estás compañías con el propósito de poner fin a estas prácticas.
